El veterinario Mario Méndez, por dictamen de la Contraloría General de la República tendrá que ser restituido en su cargo profesional que ocupó en la Autoridad Sanitaria de Aconcagua hasta que fue despedido en noviembre pasado por el Ministro de Salud.
Mario Méndez, durante el Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet se desempeñó como jefe de la Autoridad Sanitaria de Aconcagua, cargo que ocupó hasta julio del año pasado, asumiendo funciones en este mismo servicio como profesional en el equipo de Comercio Exterior y Zoonosis (cualquier enfermedad propia de los animales que puede transmitirse a las personas), siendo despedido abruptamente por el Ministro de Salud en el mes de noviembre del 2018.
Considerando que este despido fue por motivos netamente políticos, el militante del Partido Comunista, con una abogada particular interpuso un reclamo por despido injustificado ante la Contraloría General de la República; “porque de la manera que me despidieron violaron mis derechos fundamentales. Yo hasta julio del año pasado cumplió funciones como jefe de oficina de la Autoridad Sanitaria y Seremi de Salud subrogante y me cambiaron al equipo de Comercio Exterior y Zoonosis y de ese trabajo profesional me desvincularon por razones políticas ilegalmente, no me desvincularon de la jefatura.”
La resolución de la Contraloría General de la República concretamente da la razón al veterinario Mario Méndez en cuanto a su reclamo, estableciendo que el cargo que ocupaba era profesional y no político, siendo mal despedido y que tiene el derecho de mantenerse en el cargo como contrata hasta fin de año y debería renovársele el contrato si es que no existen argumentos fundados para desvincularlo.
Lo concreto es que Mario Méndez debe ser restituido en su cargo y deberá recibir el pago de todos los meses en que estuvo fuera de la repartición.
La situación sucedida con el veterinario andino sería uno de los tantos casos de mal despido que está enfrentando la Seremi de Salud de la Region, porque ya trascendió que la Contraloría le está exigiendo el despido de nueve funcionarios de confianza que estarían mal contratados. Mientras que otras 44 personas contratadas por el actual Seremi estarían sin toma de razón de Contraloría, a lo que se sumaría otra cantidad de personas en la región que también fueron mal despedidos y por lo mismo la mayoría de ellos por resolución de Contraloría están siendo restituidos en sus funciones, como es el caso de Mario Méndez.
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