Pérdidas de un 40% dejó última temporada de riego en Aconcagua, según Diputado Venegas

Al término de la pasada temporada agrícola y frutícola en el valle de Aconcagua, el Diputado Nelson Venegas, sostuvo que la escasez hídrica que azota la zona de hace 15 años y el mal manejo del vital elemento, ha significado una pérdida de la superficie de riego de más de un 60%, lo que ha significado en la última temporada de perdidas en la producción superiores al 40 por ciento.

El parlamentario sostuvo que es Dramática la situación que viven los campesinos y las campesinas del valle del Aconcagua, aseverando que —de acuerdo a datos estadísticos que maneja— “acaba de terminar la peor temporada de riego en toda la historia de esa zona”, con pérdidas superiores al 40 por ciento; “es gente de mucho esfuerzo que quiere progresar, pero lamentablemente es la más afectada por la sequía y la ineficiencia de algunas instituciones”.

Según el parlamentario socialista “acaba de terminar la época de riego en prácticamente toda la Zona Central, particularmente en la zona del Aconcagua, y es la peor temporada de riego en toda la historia. Las pérdidas en este instante son superiores al 40 por ciento. Se perdió la superficie de riego en más de un 60 %”.

“Esta situación de verdad es dramática”, sostuvo el legislador, más “cuando estamos hablando de pérdidas superiores al 40 por ciento. Nos referimos a gente del campo, a gente común; personas que quieren progresar y que ven cómo se van secando sus parcelas… Ven cómo no existe una decisión eficiente, y que de verdad ponga fin a esta situación en donde ellos se empobrecen día a día”.

“Es una tragedia”

Para Venegas esta crisis agrícola “va dejando pobreza en los territorios. Empobrece a los herederos, a toda la familia campesina. Insisto, la situación es dramática… Sin embargo, nunca se toman soluciones atingentes a la tragedia que se vive”.

“Durante todo este tiempo —agregó— que llevo de parlamentario he hablado, por ejemplo, sobre la falta de institucionalidad del agua, del tratamiento de aguas grises o aguas residuales. El embalse Los Aromos podría ser llenado tres veces con aguas residuales, pero lamentablemente se botan al mar”.

Añadió que “he hablado de desalación y, sobre todo, de la mala forma en que se reparte el agua. Hoy no se mide o no se evalúa las aguas subterráneas. No se consideran todos los afluentes. En definitiva, estamos frente a una situación que de verdad está causando estragos en la zona que yo represento, empobreciendo a miles de familias del Aconcagua, en más de 10 comunas”.

“Por lo tanto —expuso el diputado— es urgente y necesario que, de una vez por todas, tomemos en consideración esta materia, como corresponde una cuestión que de verdad es de la máxima importancia. Pero claro, como no tiene que ver con las grandes ciudades, siempre queda escondido en los archivos, queda archivado. Es necesario que las instituciones del Estado, que van desde el Gobierno hasta el Poder Legislativo, se hagan parte respecto de esta situación. Que también haya una fiscalización respecto del robo del agua; la penalización del robo del agua”.