En dos casos diferentes y por causas distintas, dos hombres domiciliados en San Felipe, de 34 y 57 años respectivamente, se quitaron la vida. El primer hallazgo ocurrió en el Monolito de la Cuesta Chacabuco y el segundo suicidio se descubrió en sitio eriazo en Las Casas Chicas de Quilpué. (Foto referencial)
De acuerdo a informaciones policiales el primer caso se trata del suicidio de Luis Culaciati González, de 57 años, que la mañana del sábado fue encontrado sin vida al interior de su automóvil en las inmediaciones del monolito de la Batalla de Chacabuco, ubicado a poca distancia del peaje del mismo nombre.
Los antecedentes que se han conocido es que Culaciati, que desde hace un tiempo estaba viviendo en Santiago, por motivos no determinados, en horas de la madrugada del sábado habría llegado hasta este lugar en su automóvil y se quitó la vida aparentemente intoxicándose con monóxido de carbono para lo cual habría conectado una manguera desde el interior del vehículo al tubo de escape del mismo.
Hasta el lugar arribó Carabineros y personal de la Brigada de Homicidios de la PDI de la provincia de Chacabuco, siendo derivado el cuerpo sin vida de Luis Culaciati hasta el Servicio Médico Legal de Santiago.
Los funerales de Luis Culaciati González, se realizarán este lunes en el Parque Almendral, después de una misa a las 16:00 horas en la iglesia La Merced.
Hombre desaparecido fue encontrado muerto
En tanto, el mismo día sábado en un sitio eriazo en el sector de Las Casas Chicas de Quilpué, un hombre de 34 años, identificado como Mario Curican, que se encontraba desaparecido desde el pasado 27 de marzo, fue encontrado sin vida, informó la Brigada de Homicidios de la PDI.
El jefe de la BH Comisario, Gino Gutiérrez, indicó que el cuerpo sin vida de este hombre fue encontrado alrededor de las 16:00 horas; “este hombre se quitó la vida, aunque esto quedó en estudio debido al avanzado estado de descomposición en que se encontraba el cadáver, pero con indicios de haber atentado contra su vida ya que fue encontrado semi sentado con un cable eléctrico atado a su cuello. Lo que tendrá que determinar la autopsia correspondiente.”
De acuerdo a las indagaciones realizadas por la Brigada de Homicidios, Mario Curican, habría terminado con su vida debido a un fuerte cuadro depresivo que enfrentaba, luego que un diagnostico médico negativo lo dejó devastado; “y cuando supo este diagnostico manifestó a su familia su intención de quitarse la vida.”
Esta persona había desaparecido el pasado 27 de marzo y su familia había interpuesto en Carabineros una denuncia por presunta desgracia.
El cuerpo de Mario Curican fue derivado al Servicio Médico Legal de San Felipe para la autopsia que se exige en este tipo de muertes.
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