El Valle del Aconcagua avanza hacia un desarrollo equilibrado con Jeannette Jara: conectividad moderna y más seguridad para las familias de Aconcagua

Las provincias de Los Andes y San Felipe necesitan un salto en movilidad y planificación territorial, y con Jeannette Jara ese proceso puede comenzar con un impulso decisivo: destrabar la extensión del tren Santiago–Los Andes. Se trata de una obra estratégica para una zona donde más de 40 mil personas se desplazan diariamente hacia otras comunas por trabajo o estudio, enfrentando traslados lentos y costos de transporte en aumento.

La apuesta apunta a integrar a el Valle del Aconcagua a un sistema ferroviario eficiente que conecte con centros productivos, polos laborales y servicios regionales, reduciendo tiempos de traslado y abriendo nuevas oportunidades económicas. Según el plan, avanzar en esta etapa permitirá que la obra pueda materializarse en los años siguientes con bases técnicas, presupuestarias y territoriales ya resueltas.

Pero la propuesta no se queda solo en la conectividad ferroviaria. Jara plantea un conjunto de medidas complementarias para mejorar la vida cotidiana: duplicación en la formación de Carabineros para reforzar la seguridad, Ingreso Vital de $750.000 con apoyo directo a pymes, pie cero para acceder a vivienda propia y devolución del IVA en medicamentos con despacho a domicilio, especialmente para adultos mayores y personas con enfermedades crónicas.

Los Andes y San Felipe enfrentan hoy una decisión relevante para su desarrollo: avanzar en proyectos que permitan integrar el territorio, mejorar la movilidad y abrir nuevas oportunidades económicas y sociales. En ese contexto, el impulso al desarrollo ferroviario aparece como una pieza clave, no solo por su potencial para modernizar los traslados, sino también por su impacto en empleo, comercio, turismo y calidad de vida para la provincia.

El próximo 14 de diciembre, el Valle del Aconcagua define su ruta. El compromiso es claro: poner en marcha el futuro con planificación, conectividad y oportunidades reales, partiendo por el tren que puede integrar a la provincia a una red moderna y abierta al desarrollo.